lunes, 28 de enero de 2013
Capítulo 41
Más tarde, Pepe me invitó a la playa, ya que mamá y Valen dormían…
Pedro- Amor. ¿Puede ser hoy la primera noche a la orilla del mar?
Paula- ¿Por qué no me avisas antes de que me desarregle? (Dije riendo)
Pedro- Sh, vos sos siempre hermosa.
Paula- No seas chamuyero, y no voy a salir acá. Bancame. (Estaba con la ropa con la que dormía, definitivamente no daba salir así. Asique volví a ponerme el vestido que había llevado puesto esa noche)
Salí del cuarto y no lo encontré a Pepe, pero si encontré una notita arriba de la mesa, toda doblada, y en uno de esos dobleces decía “Sabía que pondrías esta excusa, asique acá va mi sorpresa. Lee lo de adentro” Sonreí y abrí la notita.
“Pau, hermosa, mi amor… (Y todos los modos de los que suelo llamarte) Sé que tu último año, y quizás todos los anteriores no fueron demasiado lindos, y sé que sufriste y la pasaste mal, por eso quiero que este año sea distinto para vos, y quiero encargarme de que así lo sea, por ese deseo muchas cosas…
- Poder estar al lado tuyo cada día de tu vida.
- Poder hacerte sentir cuánto te amo cada día.
- Que puedas quedarte dormida en mis brazos todas las noches.
- Tener la capacidad de poder enamorarte todos los días un poco más.
- Poder hacerte sonreír al menos una vez al día.
- Poder ser tu sostén cuando lo necesites, que cada vez que estés mal vengas en busca de un abrazo.
- Que nos amemos cada día un poquito más.
- Que podamos volver al escenario, juntos. Que podamos volver a bailar juntos, porque así nos conocimos.
- Ser feliz al lado tuyo, y que vos lo seas al lado mío.
(Te estoy esperando en la orilla del mar, apurate porque ya te extraño. Te amo)”
Sonreí en medio de lágrimas y corrí a la playa. Lo vi paradito en la orilla y sonreí aun más. Corrí nuevamente hasta él y lo bese, abrazándolo.
Paula- Te amo Pedro, te amo, te amo, te amo, te amo. (Dije entre besos)
Pedro- (Me abrazo, levantándome un poco del suelo) Te amo. (Y volvimos a besarnos)
Paula- Te juro que no hay nada que quiera más que pasar todos los días de mi vida al lado tuyo. (Lo bese) Me haces demasiado bien mi amor, y ¿Sabes qué? Hoy me siento bien, hasta podría decirse que contenta, y eso es gracias a vos.
Pedro- (Corrió mi pelo de mis hombros y me tomo por mis mejillas y yo lo abracé por su cintura, aferrándolo más a mí) No hay nada que me haga más feliz que poder hacerte bien mi amor.
Paula- Decirte te amo juro que ya no alcanza. (Dije milímetros de sus labios y los rose con los míos) Pero aun así es lo único que puedo decirte… Te amo Pedro Alfonso.
Pedro- Te amo Paula Chaves. (Sonreímos y nos enredamos en un beso eterno)
Más tarde, comenzó a hacer frío asique volvimos a la casa y nos fuimos al cuarto, no podíamos dejar de unir nuestros labios, de unirnos en besos, besos llenos de amor, de deseo, de pasión.
Pedro- Mi amor, están tu vieja y tu hermana.
Paula- Cerramos la puerta. (Dije haciéndome la inocente y él sonrío) Dale, vos también queres… (Y nos sonreímos, él cerró la puerta e hizo que cayéramos en la cama, sin dejar de besarnos)
¿Cómo explicar lo que sentía cuando hacíamos el amor? Me sentía su mujer, su amante y su nena. Todo a la vez. Me sentía amada por él, y no había sensación más linda en el mundo que esa.
Paula- Te amo. (Susurre mientras depositaba algunos besos muy suaves en su cuello y el acariciaba mi espalda)
Pedro- Te amo. (Beso mi frente y nos abrazamos para dormir)
Al día siguiente, estaban todos en la playa y yo me sentía algo mal, bueno, bastante. No sé qué había ocurrido con el bien estar que había sentido el día anterior. Se había esfumado, como por arte de magia. Me dijeron que en esta etapa quizás la ciclotimia era normal, y tenía ganas de encerrarme al baño a vomitar, y así lo hice.
Ya me daba vergüenza pedir ayuda, asique salí a la playa como si nada hubiese pasado, con mis lentes de sol para que nadie note que había llorado.
Valen y Pepe jugaban a la paleta y yo sin decir nada, me acerque a la orilla del mar, dejando que el agua moje hasta mis rodillas e intentando respirar paz.
Después de varios minutos, aunque no sé cuántos exactamente sentí que Pedro me abrazo por atrás, y besó mi hombro.
Pedro- Hola princesa…
Paula- Hola. (Respondí algo seca, para que no note mi voz llorosa)
Pedro- ¿Estás bien? (Asentí con mi cabeza) ¿Por qué será que no te creo? (Levante mis hombros en signo de un “No sé”) Te conozco Paula, no hablas porque estuviste llorando y no queres que me dé cuenta. Tus lentes también son por eso. (Se paró frente a mí y quito mis anteojos)
Paula- No vale que me conozcas tanto.
Pedro- Dale, contame.
Paula- Es lo de siempre Pepe, y odio que sea así, porque ayer estaba bien en serio, y hoy, de nuevo la misma mierda.
Pedro- ¿Vomitaste?
Paula- Sí… (Dije vencida)
Pedro- Pau, sabes que no es de un día para el otro, y lo sabes vos más que yo.
Paula- Ojala fuese así, pero no quiero hablar, de verdad. Quiero estar bien.
Pedro- ¿Queres que vayamos a caminar? (Dijo mientras me ponía los lentes torpemente y yo reí)
Paula- Dale. (Nos tomamos de la mano y comenzamos a caminar hacía el muelle)
Cuando volvimos jugué con Valen a hacer distintas figuras con la arena, mientras mamá tomaba sol y Pepe dormía.
A la noche, cenamos pizzas caseras y después de jugar a las cartas con Valen, mamá y ella se fueron a dormir.
Pedro- Gorda. ¿Salimos a bailar?
Paula- Mmm… ¿En serio me decís? No me copa mucho ese ambiente.
Pedro- Sí, un poco de joda no nos va a venir mal. (Dijo muy serio)
Paula- Un rato… aunque…
Pedro- (Rio) Caíste como la mejor.
Paula- Sos un tarado. (Le pegue suavemente en su hombro)
Pedro- Ir al centro. ¿Te va?
Paula- No tengo muchas ganas Pepe.
Pedro- Eso es porque seguís media tristona. ¿O no?
Paula- Puede ser.
Pedro- No, no puede. Es. No me mientas, porque te conozco.
Paula- A veces odio que me conozcas tanto.
Pedro- ¿Por qué?
Paula- Porque siempre sabes cuando estoy mal, y debo ser insoportable con eso.
Pedro- ¿Seguís con eso? ¿Cómo voy a hacer para que entiendas que no lo sos y que si estás mal quiero acompañarte?
Paula- Pepe, me siento un estorbo ya.
Pedro- (Me abrazo) Te prohíbo que pienses eso. Dale. Me haces sentir mal a mí. ¿Yo te hago sentir eso?
Paula- No gordo, soy yo.
Pedro- Entonces basta, no pienses eso. (Beso mi mejilla) Dale. ¿Salimos un rato así te despejas?
Paula- ¿Te enojas si prefiero dormir?
Pedro- No, como quieras. (Beso)
Al día siguiente, mamá y Valen estaban en la playa, habían ido temprano, pero como nosotros nos habíamos dormido tarde y por ende también despertado tarde no habíamos ido todavía.
Yo no me había levantado de la cama, simplemente porque no tenía ganas.
Pedro- Gorda. ¿Vamos a la playa?
Paula- Anda si queres, yo no tengo ganas.
Pedro- (Se acercó a mí) Dale, te va hacer bien salir un poco.
Paula- No quiero Pedro.
Pedro- ¿Queres que me quede con vos?
Paula- Quiero estar sola.
Pedro- ¿Por qué no queres que te vea llorar, no? (Y me dejo sin respuesta) No podes ser tan pendeja Paula. (Me dijo casi gritándome y provoco que mis ojos se llenaran de lágrimas en un segundo) ¿Por qué mierda no dejas que te acompañe? (Me pare bastante enojada y lo mire, por primera vez en la conversación) Dejate ayudar, deja de tener actitudes de pendeja inmadura Paula.
Paula- Capaz que eso soy. ¿No? ¡Una pendeja inmadura que tiene miedo de perderte! (Respondí gritando aquella última frase y con las lágrimas cayendo sin cesar de mis ojos)
--------------
chan, chan, chan, chaaaaaaan. Qué pasará?
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
me mori:( sabia que se iba a venir una pelea por eso, malisimo:( subi maaaas por favor!
ResponderEliminarNOOOOOOOOOOO, no me podes dejar asiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiii! SEGUILAAAAA
ResponderEliminarnoooooooo, pelea no y menos si estan de vacaciones por dios
ResponderEliminarque capitulon cami
ResponderEliminarwoooouuu increíble la nove,subí más!!!
ResponderEliminarNo nos podes dejar asiiiiii, subi mas!
ResponderEliminar