miércoles, 13 de marzo de 2013

Capítulo 86



Esa noche, estábamos invitados a cenar en la casa del papá de Pepe, con sus hermanas, y creo que Fede.
Sinceramente no tenía ánimos de ir, pero después de todo lo que los ‘evite’ no podía no ir, no podíamos no ir.

Me bañe y me cambie, con la ropa que había ido a buscar a casa, pero cuando estuve lista me mire al espejo y comencé a llorar.
¿Por qué volví a esto? ¿Por qué?

Pedro- Amor… ¿Estás?
Paula- Sí. (Respondí secando mis lágrimas)
Pedro- Sí, llorando estás. (Tomo mi mano) Si no queres, no vamos.
Paula- ¿Te soy sincera? No tengo ánimo para ir, pero no puedo no ir Pepe, después de todo el tiempo que estuve desaparecida.
Pedro- Pero no quiero que vayas y la pases mal.
Paula- Si seguimos hablando va a ser peor, vamos, en serio. (Tome su mano y salimos del departamento)

En el viaje, paramos a cargar nafta y Pedro estacionó en el bar del lugar, supuestamente para ir al baño pero cuando volvió me sorprendió con un bombón de chocolate.

Pedro- (Me dio un beso) ¿Una sonrisa? (Sonreí y lo bese)
Paula- Te amo mucho. ¿Sabes? (Lo bese) Te juro que estos gestos, así simples, son hermosos y me hacen muy bien. Vos me haces bien.
Pedro- (Me beso y corrió un mechón de pelo de mi cara) Te amo. (Volvimos a besarnos y nos abrazamos)
Paula- Gracias. (Bese su cuello) No hay lugar en el que me sienta más protegida que en tus brazos.
Pedro- Y siempre van a estar para darte un abrazo de oso. Vos para mí, yo para vos.
Paula- (Me separe un poco de él y lo bese) Toda la vida.
Pedro- Te lo prometo.
Paula- Promesa de amor. (Sonreímos y nos volvimos a besar)
Pedro- Te amo Paula.
Paula- Te amo lindo. (Nos besamos)
Pedro- ¿En serio tenemos que ir a lo de mi viejo? Me quedaría toda la noche acá llenándote de besos.
Paula- (Reí) No podes ser tan tierno. (Bese sus labios) Te prometo que esta noche soy toda tuya.
Pedro- (Sonrío) Me lo prometiste.

Paula- Y me hago cargo. (Lo bese) Dale, vamos.

Pepe arrancó el auto y de a poco mi estado de ánimo se revertía, sobre todo porque íbamos cantando a los gritos, riendo…

Horacio- Hola chicos, pasen.
Pedro- Hola viejo. (Se saludaron y luego lo salude yo)
Paula- Hola. (Sonreí)

Entramos en la casa y caminamos detrás de Horacio hasta el fondo, donde estaba toda su familia. Después de saludar, él se sentó y yo me dirigí a la cocina a ayudar en lo que restaba de la comida.
Carolina- Pau. ¿Estás bien?
Paula- Sí. ¿Por?
Carolina- No sé. El otro día estabas más alegre, te noto triste.
Paula- (Sonreí) Fue solo un mal día. Perdón si estoy mala onda. No es mi intención.
Carolina- No Pau, nada que ver. Solo te note la mirada triste y por eso pregunte, perdón si parezco muy metida.
Paula- Al contrario, gracias por preguntar. (Sonreí y agarre los vasos que estaban sobre la mesada para llevarlos a la mesa)
Pedro- Pau...
Paula- ¿Qué?
Pedro- Veni. (Me acerque a él) ¿Estás bien?
Paula- Sí amor.
Pedro- No te creo. Veni. (Me tomo de la mano y me llevo a un cuarto. El suyo) Acá podemos hablar.
Paula- Estoy bien. En serio.
Pedro- Tu mirada no dice lo mismo. Te conozco.
Paula- (Suspire) Ya sabes lo que me pasa Pedro.
Pedro- No tendriamos que haber venido. Odio verte así.
Paula- (Lo tome por sus mejillas y lo bese) Yo te dije de venir. Ya está. En serio.
Pedro- (Me abrazo) Te prometo que nos vamos temprano.
Paula- No te preocupes en serio. (Bese su mejilla) Dale, vamos. (Me separe de él y lo bese)
Pedro- ¿Segura?
Paula- Sí amor. (Lo bese y salimos)
Volvimos al parque y ya estaban todos ubicados en la mesa, asique nos sumamos. Sentándonos uno al lado del otro.
Después de servirnos comida, sinceramente había comido poco y nada, no tenía ganas ni intención de comer.

Luciana- Pau. ¿Qué pasa que no comes?
Paula- No, nada. Solo estoy un poco mal del estómago.
Sonia- ¿Segura? ¿O no te gusta?
Carolina- Te buscamos otra cosa.
Paula- Gracias, pero no. De verdad. (Respondí cada vez más angustiada y en aquel momento sentí la mano de Pedro sobre mi pierna. Por debajo de la mesa y lo mire intentando agradecerle con la mirada)
Horacio- No quiero que mi nuera se vaya sin comer eh.
Pedro- Bueno, ya está. Dejenla, si no quiere comer que no coma. (Dijo algo molesto y se provocó un silencio demasiado incomodo en la mesa, solo se escuchaba el ruido de los cubiertos. Pocas veces me había sentido tan incómoda en mi vida, todo se había generado por mi culpa y mis ojos necesitaban despedir lágrimas)
Paula- Voy al baño. (Le susurre a Pedro en el oído y me levante) Permiso. (Dije y emprendí camino al baño, casi corriendo. Hasta que por fin llegue y deje caer en el suelo, ya sin poder contener el llanto)

No sé cuánto tiempo pasó, pero yo no podía parar de llorar.

Pedro- ¿Ven lo que provocan? (Escuche que grito) Por eso no quería que la conozcan.
Carolina- ¿Qué pasa Pedro? ¿Qué esconden?
Pedro- No te importa.
Sonia- ¿A dónde te vas?
Pedro- Soy bastante grande como para que me lo preguntes, pero si te interesa, voy a ir a buscarla. (Y a los pocos segundos tocó la puerta del baño y entró, cerrándola de inmediato)
Paula- No hacía falta que te pelees con ellos por mí. (Él no dijo nada y me dio la mano, ayudando a que me levante, y así lo hice, para abrazarlo)
Pedro- Eso no importa ahora.
Paula- Sí que importa.
Pedro- No, ahora me importas vos. No llores más. Por favor. (Se separó un poco de mí y seco mis lágrimas)
Paula- No me gusta que se generen éstas situaciones, y hasta ya se dieron cuenta que algo pasa.
Pedro- Pau, si vos no queres, no hace falta que cuentes nada.
Paula- En algún momento lo van a terminar sabiendo.
Pedro- Pero no es necesario que sea hoy.
Paula- No sé, quizás sí.
Pedro- No te sientas presionada. De verdad. (Me beso y yo volví a abrazarlo)
Paula- Vamos, dale. Y les pedís perdón por hablarles mal.
Pedro- Primero vos deja de llorar. (Me separo un poco de él y beso mi nariz)
Paula- Me lavo la cara y vamos.
Pedro- Te espero, dale. (Nos dimos un beso y nos separamos, me lave la cara y salimos del baño, tomados de la mano, siendo muy sincera, temblaba del pánico que sentía, y peor aun cuando llegamos y todos se callaron) No se tienen que callar porque vinimos nosotros.
Paula- Pedro. (Lo rete por lo bajo)
Pedro- (Suspiro) Perdón, ya sé que les hable mal. Pero…
Paula- Pero hay algo que ustedes no saben. (Dije muerta de miedo)
Pedro- Y no puedo verla mal, por eso reaccione así.
Paula- Perdón, capaz que yo también reaccione mal.
Sonia- ¿Pero qué pasa?
Horacio- ¿Por eso no te conocimos en todo el año pasado?
Carolina- ¿Por eso estás mal?
Luciana- ¿Qué pasa?
Horacio- Habla Paula.
Pedro- Paren, no la presionen.

Me sentía acorralada, acorralada entre la espada y la pared, la verdad y la mentira.
Mis ojos estaban invadidos en lágrimas y Pedro me abrazo por el costado…

Paula- Yo, yo… Estoy enferma.

2 comentarios:

  1. ayyy pobre pau,ojala consiga reponerse y seguir adelante!!!

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  2. ayyyy por favor! no podes dejarnos con tanta intriga, quiero saber que pasa con la familia!!!!

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