Capítulo 51

Me desperté un poco aturdida, pero más tranquila… Solo un poco. Me quise levantar pero él agarró mi mano.

Pedro- ¿A dónde va señorita? (Preguntó abriendo sus ojos)
Paula- Al baño, ya vengo.
Pedro- Te espero… (Dijo sonriendo, yo intenté devolverle aquella sonrisa y me fui)

Llovía torrencialmente, y aquella tormenta reflejada mi estado interior, creo que por primera vez ésta no ayudaba a tranquilizarme, sino que, empeoraba bastante mi estado.
Lavé mi cara, sin mirarme al espejo porque mis ojos hinchados de tanto llorar deberían ser un espanto.
Volví y me senté a su lado, sin decir nada… Porque no sabía qué decir.

Pedro- ¿Un poco mejor? (Hice un gesto de ‘no sé’ con mis hombros, sin mirarlo. Él tomó mi mano y me dio un beso en ella) Hey, mirame.
Paula- ¿Para?
Pedro- Emmm… Porque generalmente las personas cuando se hablan se miran.
Paula- Yo no entro dentro de los parámetros normales del mundo. (Dije intentando sonar divertida, lo cual creo que no me salió.... Y seguía sin poder mirarlo)
Pedro- Pau, dale... Mirame.
Paula- Me muero de vergüenza. (Dije ya sin poder contener las lágrimas)
Pedro- ¿Vergüenza de qué?
Paula- (Suspiré) Llegas a conocer mi lado más vulnerable y me siento demasiado a la deriva...
Pedro- ¿No te gusta que lo conozca? (Preguntó tomándome del mentón para que por fin lo mire)
Paula- (Negué con mi cabeza) No, no es eso… Creo que me gusta que lo conozcas, me hace sentir un poco más… Segura, o eso creo.
Pedro- ¿Y entonces? No tengas vergüenza…
Paula- ¿Soy muy enroscada, no?
Pedro- Un poco… Un poco bastante.
Paula- Es lo que hay. (Dije volviendo mi vista hacia abajo)
Pedro- Tonta, no lo dije a modo de queja… Yo estoy enamorado de vos como sos.
Paula- (Suspiró) ¿En serio te enamoraste de una mina que no tiene ganas de vivir?
Pedro- Paula… (Hizo que lo mire, otra vez) ¿En serio dudas de que yo esté enamorado de vos?
Paula- No, me lo demostras todo el tiempo… (Él sonrió) Es que a veces me cuesta entender cómo pasó.
Pedro- Vos no sos solo un problemas. ¿Sabes? Yo sé que vos lo sentís así… Yo sé que vos sentís que sos una mina complicada, que para lo único que sirve es para llorar. ¿O no? (Yo asentí con mi cabeza) Bueno, eso no es lo único que sos… Yo estoy enamorado de vos, de tú persona, de tu personalidad, de tu modo de ser, de tu modo de mirar, de caminar, de sonreír, que aunque lo hagas poco sé que tu sonrisa es la más hermosa del mundo. Estoy enamorado de tu corazón, de tu alma…. Y por eso quiero ayudarte a sanarlos, porque creo que ya es hora de dejar la angustia de lado, que es momento de darle lugar a la alegría. ¿No te parece?
Paula- (Sonreí, solo un poco) A mí lo que me parece es que sos de otro planeta… (Él quiso hablar pero no lo deje) No, para… Dejame hablar a mí ahora. (Dije secando mis lágrimas y él asintió con su cabeza, yo suspiré para poder retomar mis palabras) Te juro que odio vivir así, no estoy bien así, y creo que eso es evidente. Odio la vida que tengo, odio la angustia en la que vivo, odio odiarme. Es horrible, es una mierda, y aunque a veces lo esconda es algo que me pasa todos los malditos días. Todos. (Volví a secar mis lágrimas) Y si más de una vez busque sacarme la vida es porque no encontré otra solución, porque la única que me quedaba era dejar de sentir toda la mierda que siento a diario… (Dije temblando y casi sin poder hablar, pero necesitaba terminar, asique volví a suspirar) Y me sentía una egoísta haciéndolo, porque sabía que si me mataba vos ibas a sufrir, mamá también y Valen también, y al fin y al cabo son los únicos que me dan un poquito de alegría todos los días… (Otra vez sequé mis lágrimas) Quiero encontrar otra salida, necesito hacerlo… Pero el hecho de saber que quizás empiece a mejorar y que el día de mañana, cuando queramos tener un hijo, vuelva todo me hace sentir que todo va a ser en vano.
Pedro- No va a ser en vano, porque si estás mejor quizás puedas tomarte las cosas de otro modo.
Paula- Ojala… Pero yo ahora, así, te juro que no puedo más. No me da más el alma, el corazón ni el cuerpo… Tengo miedo de todo, tengo miedo de vivir cada día, bah. ¿Qué digo vivir? De sobrevivirlo… Porque eso es lo que siento que hago, sobrevivir. (Él tomó mi mano) Me cansé, me harté. No doy más. (Dije dejándome caer en la cama, y estallando en llanto, aún más) Y te juro que también me cansé de que ahora vos me tengas que bancar así, abrazarme, mirarme, tranquilizarme… Me cansé de que no podamos disfrutar de nada por mi culpa… No entiendo cómo me soportas.
Pedro- No, no empieces con eso… Por favor. Me da pánico que toques ese tema, porque en sí fue el principio de nuestra separación.
Paula- (Suspiré) Aunque me llene de culpa no reaccionaría así, y tampoco siento lo mismo que antes, creo que si después de tantos años y de tanto mal que te hice, me perdonaste y estás acá conmigo es porque me amas en serio.
Pedro- Me tranquiliza y me hace bien saber que lo sabes.
Paula- Más que saberlo, lo siento. (Dije y él se acostó a mi lado, los dos nos acomodamos enfrentados)
Pedro- (Acarició mi mejilla) Te amo mucho… Mucho.
Paula- Yo también mi amor, demasiado… Y te juro que no me va a alcanzar la vida para agradecerte tanto.
Pedro- (Posó su dedo índice sobre mi boca) Por ahora, con que dejes de llorar y estés un poco mejor, me basta. (Yo sonreí y nos besamos)
Paula- Sos de otro mundo, de otra galaxia… Ya sé que suena a una frase súper infantil, pero así lo siento, sos uno en un millón Pedro, y todavía no puedo creer que te hayas bancado todo lo que te bancaste conmigo, que a pesar de todo sigas a mi lado…
Pedro- El amor todo lo puede. ¿Te soy muy sincero? Si no te amara como te amo, y si no estuviese seguro de que sos el amor y la mujer de mi vida, creo que nunca me hubiese venido acá por vos, y nada de todo lo que pasó desde que nos reencontramos hubiese pasado… Pero las cosas son así, yo te amo y eso no va a cambiar nunca. Siempre juntos, a pesar de lo que pase. En las buenas están siempre todos, pero en las malas es en donde está la gente a la que verdaderamente le importas.
Paula- (Sonreí y lo abracé) Te amo tanto… Gracias, y perdón.
Pedro- (También me abrazo) Nada que agradecer, y menos que menos por lo cual pedir perdón… Y yo también te amo, muchísimo. (Besó mi mejilla) Y no llores más, hey.
Paula- (Se separó un poco de mí) No quiero hacerlo más, de verdad…
Pedro- (Secó mis lágrimas con besos por toda mi cara) Busquemos algún plan para hacer acá adentro… Digo, porque salir se nos va a complicar un poco. ¿No?
Paula- Me parece…
Pedro- Mmm… Igualmente te propondría salir a caminar debajo de la lluvia, pero hay tormenta eléctrica y es peligroso.
Paula- No da… Pero lo que sí da es que nos quedemos acá, hace frío, y no tengo muchas ganas de hacer algo.
Pedro- Pero sí nos quedamos acá no vas a dejar de llorar, lo sé.
Paula- Mmm… No sé, capaz que vos encontras algún modo para que yo deje de hacerlo.
Pedro- (Sonrió pícaro) No te entiendo mucho amor, la otra vez me mandaste al carajo.
Paula- (Reí) Soy… Complicada, ya te lo dije. (Lo besé) Quiero sentirme un poco mejor, quiero hacer lo posible para disfrutar de estos días solos, intentarlo al menos. Lo que me dijiste me abrió un poco bastante la cabeza… (Suspiré) Y sé que va a ser súper difícil, pero recién tengo 28 años, y así no soporto más.
Pedro- Me encanta haberte podido cambiar un poco el modo de pensar. (Sonreímos)
Paula- Te amo Pedro… (Dije a milímetros de su boca y lo besé)
Pedro- Sabes que yo también te amo, y muchísimo… (Dijo aferrándome a él, abrazándome por la cintura)
Paula- (Rosé mi nariz con la suya) Te necesito conmigo, quiero cambiar… Pero sola no puedo. 

Pedro- Yo estoy con vos mi amor. (Me besó)
Paula- (Suspiré) Me siento muerta en vida, y vos sos el único capaz de hacerme sentir viva, amándome, amándote, amándonos.
Pedro- Porque el amor es vida. (Sonreí y volvimos a unir nuestras bocas, besándonos, besos que desembocaron en amor y nada más que amor…)
Paula- (Besé su pecho y me acomodé sobre el mismo, él besó mi frente y me tapó con las mantas) Es increíble como siento ésta definición o significación de la palabra amor… Me haces sentir viva y olvidarme de todo al menos por un ratito. Gracias…
Pedro- (Me abrazó fuerte) No puedo amarte tanto… Y vos me enseñaste eso, y es increíble como también logro sentirlo.
Paula- Te amo mi amor. (También lo abracé)

Al fin esa lluvia paró, al menos un poco, y pudimos salir a comprar algunas cosas, para cenar y poder pasar el resto de los días. Seguía haciendo demasiado frío, y recién era la tarde.

Paula- Me voy a bañar amor.
Pedro- Te espero con una merienda. ¿Queres?
Paula- Dale… (Me acerqué a darle un beso. Me bañé, intentando terminar de tranquilizarme y salí en bata) Me intimidas un poco… Deja de mirarme así.
Pedro- Sos muy, muy hermosa. Hacete cargo.
Paula- (Sonreí y le di un beso) Gracias… Pero me voy a cambiar, hace mucho frío…