Capítulo 55

Escuche que tocaron la puerta y corrí a ella, abrí y lo abracé.

Pedro- Hola mi amor. (Beso mi mejilla, abrazándome)
Paula- Hola. (Nos separamos un poco y nos besamos) Ya sé que te lo digo siempre, pero te extrañé. (Reímos y volvimos a besarnos. Entramos al cuarto de la mano y Pepe la saludó a Camila)
Camila- ¿Puedo hablar un rato con los dos?
Pedro- Por mí no hay problema.
Paula- ¿No tenes qué irte Cami?
Camila- No, hoy me toca quedarme toda la noche, además lo hice venir a él para hablar con los dos. Siéntense.

Nos sentamos en la cama, y yo me recosté sobre él. Necesitaba aprovechar que lo tenía conmigo, él me abrazo y acarició mi pelo.

Paula- Perdón si me pongo muy cómoda, pero necesito aprovechar que lo tengo cerquita.
Camila- (Rio) Creo que ya tenemos un poco de confianza. No hay problema. Recién Pau me contó que vos fuiste el primero en saber lo que le pasa. ¿No? (Pepe asintió con su cabeza) y me dijo que cada vez que podía controlarse te buscaba a vos... Por eso, creo que tienen una relación muy fuerte.
Pedro- Muy. (Yo sonreí y él beso mi frente) Soy muy sincero, si no la amara tanto nunca me hubiese bancado todo esto. Y además, ella lo sabe, cuando nos conocimos yo estaba muy mal porque había perdido a mi mamá y siempre me hacía bien estar con ella.
Paula- Y a mí siempre me hizo bien estar con él.
Camila- Me di cuenta. Siempre está presente en tus relatos.
Paula- Es que él me salvó. En serio. Nunca me hubiese animado a contárselo primero a mamá. 
Camila- Bueno... Yo suelo incluir a alguien cercano a las pacientes en algunas consultas o ejercicios determinados. Sobre todo en chicas como vos que necesitan tanta contención afectiva... Asique si él quiere, puede hacerlo.
Pedro- Ella sabe que hago lo que sea por verla bien. Y además no nos extrañaríamos tanto... (Sonreímos y nos dimos un pico) 
Camila- Y hoy podemos empezar con que se quede a dormir...
Paula- Ai sí. Por favor. (Dije con una sonrisa enorme) 
Camila- (Se levantó) Descansen. Hasta mañana. 
Paula- Hasta mañana Cami. (Y ella se fue) Me parece que voy a hacer lío más seguido. (Dije riendo y nos besamos) Te amo mucho. ¿Sabes?
Pedro- (Sonrió y beso mis labios) Te amo mi amor. (Volvimos a besarnos) ¿Estás mejor? ¿Qué pasó?
Paula- Una pendeja que me dijo cosas horribles que ahora no importan.
Te tengo todo para mí toda la noche no voy a desperdiciarte hablándote de esa tarada.
Pedro- Mmm... ¿Y cómo queres no desperdiciarme?
Paula- Así... (Dije besando su cuello y él me abrazo contra su cuerpo) Y así... (Lo abracé y me recosté sobre él) Y sabes que otro así. (Dije riendo y él comenzó a jugar con mi pelo) ¿Te dije muchas veces que amo que siempre sepas lo que necesito?
Pedro- (Beso mi cabeza) Me encanta mimarte.
Paula- Y a mí me encanta que me mimes... Y además, es la primera vez que voy a dormir sin miedo. Decime la verdad... Esto a oscuras da miedo.
Pedro- Sos un poquito exagerada mi amor. 
Paula- Puede ser... Pero igual. (Me levante, solo un poco, y lo bese)
Pedro- Extrañaba que seas así de mimosa conmigo. (Sonreí y volví a besarlo) Te extrañé mucho todo el tiempo que estuvimos separados, y ahora también.
Paula- Yo también, todo el tiempo. Te extrañé, te extraño. Siento que siempre todo es difícil para nosotros, para mí. No sabes lo que anhelo una vida feliz al lado tuyo. (Confesé siendo demasiado sincera)
Pedro- Vamos a ser felices, te lo prometí. Soy un hombre de palabra, prometo lo que cumplo, y más si se lo prometo a personas tan especiales y que amo tanto. Como a vos.
Paula- (Sonreí) Confío en vos. ¿Sabes?
Pedro- Te amo.
Paula- Te amo. (Nos besamos y volvimos a abrazarnos)
Pedro- (Corrió el pelo de mi cara) ¿No queres ir a cambiarte así dormís?
Paula- No quiero volver al baño… No ahora.
Pedro- ¿Queres que te acompañe?
Paula- No, además me llego a cruzar con Florencia y la mato.
Pedro- ¿Puedo saber qué pasó?
Paula- Me toco algo muy adentro mío.
Pedro- ¿Qué cosa?
Paula- (Suspire) Empezó con que las que no tenemos viejos somos unas taradas, porque por algo se supone que nos odian. Y me dolió, mucho, porque siempre intente que mi papá me quiera y nunca lo logré. Y sé que es una cuenta pendiente que voy a tener de por vida conmigo misma.
Pedro- Pau… Vos hiciste lo que pudiste, y si él no te quiso o no te quiere, no es tu culpa.
Paula- Creo que no. Pero no sé, es algo en lo que falle. Yo lo siento así. Igualmente Cami me dijo que es imposible forzar a alguien para que sienta algo, y sé que tiene razón. Pero hablemos de otra cosa, por favor.
Pedro- Vos deberías dormir, no charlar.
Paula- No Pedro. Te tengo a vos, no voy a dormir.
Pedro- No vas a pasar toda la noche sin dormir, te lo aviso.
Paula- ¿Por qué? (Dije en tono de queja)
Pedro- ¿Cómo por qué Paula? Estás muy débil todavía como para no dormir.
Paula- ¡Ufa! No vale, quiero estar con vos.
Pedro- Pienso dormir con vos Pau.
Paula- (Reí) Bueno… (Dije cerrando mis ojos) Pero quiero muchos mimos. (Dije jugando con su pelo)
Pedro- (Tomo mi mano, con la que lo mimaba y la beso) Descansa, dale.
Paula- Dejame mimarte un poco gordo.
Pedro- Tenes que descansar mi amor.
Paula- Pedro. (Dije algo enojada y levantándome un poco)
Pedro- No te pongas en caprichosa Paula.
Paula- No quiero pelear con vos la única noche que podemos pasar juntos. Mimándote no hago ningún esfuerzo. Dale, vos también necesitas que te mime un poco. Lo sé. Aunque no me lo digas, y aunque me hayas prometido que no iban a existir secretos noto tu mirada triste.
Pedro- Me parece que decís cualquiera.
Paula- Dijiste que no ibas a mentirme Pedro.
Pedro- No te estoy mintiendo Paula.
Paula- (Me levante súper enojada, sentándome a los pies de la cama. Él se sentó frente a mí) ¿Ves? Esto era lo que yo no quería que pase, sabía que todo esto también te iba a hacer mal y que te lo ibas a guardar y no me ibas a decir nada para supuestamente cuidarme. En serio que si me vas a mentir, no quiero seguir. Porque vamos a terminar como la otra vez.
Pedro- Para Paula, no lleves todo al otro extremo.
Paula- ¿Qué extremo Pedro? No me gusta que vos siempre estés para mí y yo nunca para vos. Eso no es una pareja, una pareja, además de muchas otras cosas, es contención de ambas partes. No de una sola.
Pedro- Pero no quiero hacerte mal…
Paula- Me haces mal cerrándote en vos mismo también. Y yo tampoco quiero hacerte mal, y sin embargo, sé qué, que yo este acá te hace mal. No me gusta que sea así, te lo digo desde mi lado más sincero, no quiero que vos estés mal y yo no poder escucharte, o darte un abrazo cuando vos siempre haces eso conmigo. Siento que es injusto, me hace sentir culpable.
Pedro- (Suspiro y se le llenaron los ojos de lágrimas) Quiero cuidarte y hago todo lo contrario. (Me acerque a él y acaricie su mejilla) Intento hacerme el fuerte y no me sale. (Y las lágrimas comenzaron a correr por sus mejillas, humedeciéndolas)
Paula- No tenes por qué hacerlo Pepe. Te juro que me mata de amor que quieras cuidarme todo el tiempo, pero no me gusta que te olvides de vos.
Pedro- Es que… (Y no pudo seguir hablando porque se largó a llorar y yo lo abracé) Es difícil saber que estás acá, y yo allá, sin poder estar con vos. Pero me siento un tarado, porque me pongo en tu lugar y sé que para vos debe ser todo millones de veces más difícil.
Paula- (Bese su mejilla, sentidamente y lo abracé más fuerte) Un día me vas a matar de amor. ¿Sabes? (Y él rio) Te amo mucho mi amor. Mucho.
Pedro- Te amo hermosa. (Nos besamos) Perdón, parezco un nene.
Paula- No pidas perdón,siempre yo soy la que tiene actitudes de nena, y vos el hombre que me cuida. Si se invierten los roles no tiene nada de malo. (Él sonrió y yo bese su nariz)
Pedro- Te extraño mucho. Necesito sentirte cerca, de nuevo.
Paula- Entonces dejame mimarte. (Dije algo enojada, pero divertida a la vez) Y haría otras cosas, pero acá no podemos… (Le dije a su oído y él me abrazo por la cintura)
Pedro- No me provoques porque no me importa nada. (Dijo riendo y nos besamos) Te amo.
Paula- Te amo. (Volvimos a besarnos, y esa fue la única acción en los siguientes minutos)

Nos acostamos, abrazados y mimándonos entre los dos hasta que nos quedamos dormidos.


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